Al final lo que me da pena de todo esto es que siempre se recuerdan los disturbios. Los imbéciles que montan gresca ( unos dicen que pagados por el gobierno, otros que son de extrema izquierda y yo que digo que me la pelan los motivos) Que lo que pasó es una vergüenza y que por una vez en mi vida entiendo a los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado y les apoyo. Allí solos, con un triste escudo de plástico y un par de porras, sin órdenes de cargar y sin refuerzos necesarios. Ahora entiendo a un amigo mío que es del gremio y me dice siempre: "no deberías quedarte con el poli que sale dando estopa si no con lo que pudo pasar antes" Que si, que también reconozco que hay veces que se pasan, pero en la tele también ponen lo que interesa: la carnaza, la sangre, los palos a trocho y mocho. Una vez este mismo amigo me dijo: "yo solo cumplo una orden. Es mi trabajo. ¿ Sabes lo que es estar delante de gente que te insulta, te tira cosas y tu allí quieto como si no pasase nada? y por supuesto que no lo entendí. Es más, fui intransigente a más no poder y le dije que era un " esbirro del gobierno" que estaba defendiendo a unos señores que le habían recortado el sueldo o que habían hecho que con su reforma laboral algún ser querido se fuese a la calle con una palmadita en la espalda y poco más. A continuación él me dijo ¿ qué me estás contando, que mañana llega Rajoy al hospital, peligra su vida y tu no le atiendes ? ¿ atenderías a un asesino o te quedarías sentada porque va en contra de tus principios? me dejó sin argumentos, pero yo enseguida me fui por la tangente y le dije "no sufras que Rajoy no va a ir a la pública y no me va a poner en esa tesitura" Ahora con cierta lucidez mental, que me ha costado mucho adquirir y que me viene y me va me he dado cuenta de que ellos hacen exactamente lo mismo que yo: su trabajo. Y que yo también tendré muchas veces en mi vida que atender a gente que no quiero pero no por ello me voy a poner de bruces y decir por aquí no paso, porque me juego mi pan y mi sustento, igual que lo hacen ellos.
Absoluto apoyo a todos esos policías que estuvieron el 22M capeando el temporal y muy en especial a esos que están graves o convalecientes. Siento vergüenza ajena por lo sucedido. Las protestas se defienden con pancartas o con consignas, no a base de destrozos o de herir al personal. Ojalá esto no se repita nunca más, ojalá en la siguiente manifestación solo se hable de la gente que asistió y reivindicó sus derechos pacíficamente. También se, que había mucha gente allí y que solo unos cuantos la liaron pero por culpa de esos anormales hoy en todos los telediarios del 22M solo se recuerda la violencia y el ensañamiento.
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