Si algo he aprendido la semana pasada es que por mucho que uno piense que lo suyo es lo peor, lo más horrible, siempre, siempre hay alguien peor. Y esto siempre pasa, pero yo antes estaba tan metida en mi propia miseria que olvidaba por descuido la de los demás. Hay tantísima gente que sufre, que ve el día negro aunque esté despejado, que esta tan tan sola. Hay días que no lo valoro que estoy en mi universo, nadando en mis problemas pero días como hoy me doy cuenta de la suerte que tengo. Aunque solo sea por tener una ilusión de tarde en tarde, o por tener ganas de hacer cosas o gente a mi lado que se preocupa de mi. A pesar de que siempre les cuente lo mismo, a pesar de que mis películas les suenen demasiado. Hoy quiero dar las gracias a todos los que me han ayudado a ver el sol detrás de las nubes, a todos los que han tirado de mi ( y seguirán haciéndolo) cuando yo este de pataleta y me tire el suelo sin querer moverme. Sé que siempre os doy las gracias, pero es que os las merecéis día a día. Os quiero gente
No hay comentarios:
Publicar un comentario