martes, 1 de diciembre de 2015

SILENCIO A GRITOS

¡Paren el mundo, quiero bajarme! Rezaba una frase que un día leí y jamás olvidé. Y desde entonces me he querido apear cientos de veces, ponerme en standby y quedarme encerrada y a oscuras con toda mi amragura. Porque esa por mucha orden de deshaucio que yo le mande sigue aferrada y en modo Okupa dentro de "mi no ser" 
    Y creo que ese es uno de los rasgos más típicos de cualquier adición: que oculta entre su oscuridad a la persona y a su vida.  Al principio peleas, luego sucumbes y un buen día te quedas sin batería y sin ganas de encontrar el maldito cargador. Yo me comparo con un iceberg, me hago una gran corazada en la cual ni entra ni sale nada, donde no puedo herir ni herirme. Aunque siendo egoísta creo que lo que me paraliza es el calor de cualquier emoción humana. No vaya a ser que con cualquier "te quiero" o cualquier abrazo se me derrita el chiringo y no me quede más remedio que llorar y decir la verdad. Que la culpa me quita el sueño todas las noches, que me odio por no ser feliz, por no disfrutar de nada, por ser incapaz de decir que tengo miedo, que la navidad despiertas todos y cada uno de mis traumas. El maldito anuncio de la Pataky y sus virtudes o el de Tous al más puro estilo navideño, recordando que una de las personas que más te quiere en este mundo es tu padre. Y yo lo veo y me asfixio, me doblo por la mitad. Porque en matemáticas no siempre dos más dos acaban siendo cuatro. Ni yo tengo el cuerpo de la Pataky ni tampoco el padre que tiene la del anuncio de Tous. Y eso jode, jode tanto que partirías la tele en pedazos o recogerías firmas en change.org para que los retirasen de los espacios publicitarios. Y ya se que la culpa no es de la tv, ni del entorno, ni la de piedra con la que tropezaste. Pero con esa baza juega la adición. Y en navidad por más "jingle bells" que te propongas estar el cuerpo solo te pide dormir y despertarte cuando todo haya acabado. Y es el mono el que hace su mejor campaña de marketing en fechas señaladas para que hagas tu balance negativo de rigor. Para que recuerdes todos y cada uno de tus fallos y te flageles en su nombre, para que no olvides todo lo que el miedo te arrebató de las manos por cobardía. Se hace eco de tanto daño proyectado en los que más amas. Porque estás tan harta, tan irritada, que si no compartes toda esa frustación cn el prójimo enloquecerías. Y jodes para joder pero lejos de aliviarte sabes que has dado en la diana equivocada y el sentimiento de culpa sé multiplica. Sin embargo ese es uno de mis momentos preferidos. Es justo ahí cuando las palabras exactas pueden hacer magia y conseguir que te derrumbes y que digas de una maldita vez que te asusta no sentir la vida, que solo estás tranquila durmiendo, que te olvidas de citas médicas, que no te centras ni en el trabajo porque tus inseguiridades te dicen "que no vales, que no sabes, que no mereces estar allí" Y quien te quiere tanto como para quedarse ahí cuando solo eres odio y reproche te inyecta un chute de esperanza aderazado con "si se puede" y una pizca de "cree en ti" Pero al día siguiente la apatía y el embotamiento emocional siguen ahí y te dejas llevar como la corriente. Porque es más sencillo vivir en la excusa del "no puedo", que echarle un par de huevos y llorar por todo lo que no  has llorado y por todo lo que no te has preocupado.Pero ¿ y si empiezo y no puedo parar? ¿ y si me tocan por loca? Porue el hecho de ser adicta no significa que sea tonta. Soy consciente de que mi problema me hace magnificarlo todo y que muchas veces la gente pone cara de pocker. Es por eso que solo encuentro el consuelo en los de "mi especie", porque los demás te quieren y te dicen que te entienden pero en el fondo no pueden entenderte por mucho que quieran. 
    Quién en sus cabales llegaría a comprender que llevas toda la vida buscando la pastilla, la dieta o el milagro de turno que te haga no atracarte, que no sume más kilos a tu desesperación, que te haga la puesta a punto para esas bodas, bautizos y comuniones que tanto te angustian.  Es tal el nivel de exigencia que te autoimpones que vives minuto a minuto como si fueses una gran estrella del cine y todos y cada uno de tus movimientos, estilismos y decisiones fuesen a ser portada y carnaza para programas basura y prensa rosa.
    Y en este GH oí muchas veces autocríticas y críticas externas sobre el peso de una concursante a la que yo veo estupenda. "Te compro tu sobrepeso guapa" Pero bueno la diferencia es que lo suyo es algo que se puede expresar en kg y lo mío "es una enfermdad del alma" como me dijeron una vez. 
     Para que nos hagamos una idea: si siento cualquier emoción ( del tipo que sea) en exceso, como. Si me surge un imprevisto, si discuto, si se acaba mi marca de yogures en el súper, si siento que no pude hacer mi trabajo como yo quisiera, si tengo una cena, si es navidad, si cambian la hora.....esta menda COME. Y lo escribo en mayúsculas porque son cantidades desproporcionadas.  Todo lo desencada una emoción o un pensamiento mal gestionado. Llega el hambre emocional y el comer sin sentido, ni gusto, ni vista. Porque en momentos así no saboreo nada, solo engullo. Y el estómago te dice basta pero la cabeza aún necesita más para llenar ese vacío sin fondo que no lo llena nada. Y después llega la culpa, la desesperación, los se acabó sin punto final, las molestias de estómago, las ganas de devolver, de no querer salir de la cama, de que nadie vea que estas gorda, deprimida y sin fuerza de voluntad. 
   Así que la próxima vez que le digáis a alguien que por un bombón, unas patatas fritas, o por un pequeño exceso no pasa nada. Yo os digo que si, que puede pasar y mucho pero no ante vuestros ojos, si no en la soledad de nuestra casa. Supongo que ese es el mayor de los problemas.  LA SOLEDAD. Leí hace poco que la comida estaba caliente cuando teníamos frìo, que estaba siempre dispuesta, que no se iba ni nos abandonaba cuando nuestros padres si lo hacían.  A día de hoy yo se que la comida va a estar para mi las 24h del día y los 365 días del año.
     Imagino que desde pequeña aprendí a comérmelo todo. Jamás me faltó de nada (materialmente hablando) pero si que me hubiese venido bien un cursillo de verano en el que me explicasen que eran las emociones y que hacer con ellas.  Me recuerdo de niña comiendo picadillo y no dejando ni un resto en el plato. Mi padre siempre me decía que no hacía falta lavarlo de lo impoluto que lo dejaba.  Mi padre ese que no supo hacerlo mejor y que estaba en el momento equivocado en el sitio oportuno. Y yo ahí partiéndome el lomo porque me quisiese como yo quería pero nunca era demasiado. Y aprendí que el amor es esfuerzo y dedicación, y que si no me quieres como quiero que me quieras yo debo pelear por ser la mejor hija del mundo mundial. Ahora se que quién no se ama a si mismo es incapaz de amar. Pero aún así, en los días de barra libre de fantasía aún sigo esperando que quieras ser mi padre. 
     Y mi madre esa que trabajaba sin descanso para que a mi no me faltase de nada, aunque a veces piense que si pudiera escoger habría escogido sus abrazos y pasar más tiempo con ella antes que todos los juguetes del mundo. Mi madre, esa que peleó tanto por mi futuro que llegó a exigirme en exceso, a hacerme tener miedo a sacar un 8, a defraudarla. Luchó tanto porque su historia no se repitiera que a día de hoy somos como dos gotas de agua. La única diferencia es el diploma que cuelga en la pared y que conseguí a base de atracones, interminables horas de estudio y autoexigencia y algún que otro lexatin. Y es por ese "trauma" por el que ahora la palabra oposición hace que me tiemble hasta el pelo, hace que reviva lo que mi cabeza quiso olvidar. Y a día de hoy tengo muchas fobias, entre ellas abrir un libro y pelear por mi futuro. Porque igual fracaso, porque los miedos y la comida toman el mando y yo ya no soy persona. 
    Y sin darme cuenta crecí en mi burbuja de caprichos insonorizada. Hasta que un buen día oyes los ruidos de fondo y no son de risas precisamente. Y esto no es una crítica, es un acto de comprensión y gratitud  hacia dos personas que pensando que hicieron lo mejor para mi hicieron lo peor.  Aprendí a que me excluyesen : de sus problemas conyugales, de la enfermedad de Pepín, de cualquier factor externo que me perturbarse. Y me hice adulta mirando para otro lado, enfadándome con el mundo y dándome muchas hostias. Y siempre, en todos esos momentos la comida ha estado ahí. Es más fácil abrir una bolsa de patatas fritas que decirle a tu a madre cosas que sin pretenderlo van a hacerla sufrir. Con que valor preguntas por què no cogimos la puerta y lo mandamos a freir espárragos, con que autoridad moral le digo yo que mejor me había criado sin padre. Precisamente yo, la experta enrelaciones  tóxicas, la que más puede llegar a comprender que peleó como una jabata porque creía que entre tanta mierda había algo que merecía la pena. Con que autoridad le digo que tenía que haber tirado ese amor envenenado, haberse secado las lágrimas y quedarse conmigo sola. Con lo que me cuesta a mi ocuparme de mi misma no quiero ni imaginarme como se habría sentido ella con el corazón roto,  el lomo partido de trabajar y siendo divorciada. 
     Y a mi padre le podría reprochar miles de cosas pero de adicta a adicto sobran las palabras.Su frialdad, su humor agrio, su insatisfacción, sus críticas autodestructivas hasta matar, hasta clavarlas en el alma las comprendo pero no las justifico. Si tuviese valor le diría que fue una actitud cobarde, que debería haberse bajado del barco. Pero como te apeas en mitad de la función de tu mar en calma embravecido, de tú somos los felices infelices. Ahí nadie pudo ni quiso apearse del barco en el próximo puerto. Le diría lo mismo que Kelly Clarkson le dice a su padre es "because of you". Que es por él por lo que no confío en nadie, por lo que me da miedo que alguien entre en mi vida y luego me abandone. Y se que no fue un abandono al uso pero me sentí "huérfana de cariño de padre" siempre Que es por el por lo que sigo en el "muelle de Avilés", con el mismo "rictus" que la "lloca " de Gijón echando raíces y oxidándome día a día.Por si un buen día te da por volver y quieres ser mi Ulises. Te diría que por ti repetí vuestra historia y  lloré mares de desamor. Porque sabes de sobra que juré y perjuré que a mi no me pasaría lo mismo. Es por ti que si me quieren como me quiere Alberto me siento como gato panza arriba. Y le doy coces y hago letreros de neón para que se vaya, para que no sea otra víctima más de esta muñeca rota que escribe. Porque me conecta con mi humanidad, con mis ganas de vivir, porque derrite en mil pedazos mi gélido escudo y lo que siento me duele. Porque no conozco a nadie que sepa tan bien como él que maldita tecla tocar para que deje de culpabilizar y herir y empiece a hablar de todo lo que me atormenta: Es sentir que la vida te asfixia, que se te queda grande, que estás tan bloqueada que has vuelto ser aquella niña sin mecanismos de defensa. Y tú desde cría has querido ser una superwoman. ¡Las heroínas no lloran! Así que para seguir interpretando tu función comes, eres la alegría de la huerta, la mejor amiga, la mejor amante, la mejor que sea pero siempre LA MEJOR. 
     Hasta que un buen día estás tan desesperanzada, tan atiborrada de dulces y saladitos que la adicción esconde lo bueno y te deja sin defensas y con todo lo malo sobre la mesa. Que a estas alturas, la cabeza te da tantas vueltas que lo malo roza la mayor de las desgracias. Y todo te molesta, ni siquiera una buena ducha es capaz de relajarte. Y no quieres planes, ni eventos, ni contratos del siglo, ni amores de los requetebuenos. Solo quiere estar a solas con tus miserias y tu victimización. Cualquier persona que no te pase la mano y te diga que espabiles es tu enemigo número uno. 
       Porque la incógnita de tu vida esta mal enfocada. No es un problema de kilos.  Ante preguntas equivocadas respuestas inútiles ¿cuándo voy a parar de comer? ¿Llegarè a Navidad en mi peso? ¿Sigo con la dieta de batidos o me pasó a la Dukan o a la de la piña?  Y ya sabes que mientras tu vida depende de un número en la báscula y de contar calorías el libre albdrío de atracones esta asegurado. Y claro yo a veces, en el punto más álgido y más loco de mi problema siento envia de anoréxicas y bulímicas, de alcohólicos y de la madre de todas las suertes que les hizo ser unos "yonkis" socialmente aceptados. Como si el simple hecho de que la gente supiesen que existen y lo "acepten" fuese suficiente. En el cerebro de mis envidiados y en el mío se desencadena lo mismo pero yo me creo la más perjudicada porque mi droga es legal y se necesita para vivir (aunque yo la use para "morir") Los bares, las navidades, los bingos on line, destrozarse el esófago vomitando, o sentirte mórbida pesando 30 kg es una suerte no te jode. El problema es que estás tan atascado que eres incapaz de ver que su sufrimiento es esquivalente al tuyo, que en tu autodestrucción dejas cadáveres a tu paso (llámense madre, novio, abuela, amigos....etc, etc) 
      Lo bueno de tocar fondo es que más abajo no se puede ir, que a partir de ahí todo es subida, que no hay mal que cien años dure, que todo llega, todo pasa y todo se supera.  Si no exisitiese la esperanza, la resiliencia, la fuerza de voluntad yo no habría sido capaz de escribir estas líneas, de sentir en el Silencio que sigo viva, que me late el corazón, que mi esencia esta dormida pero no perdida. 

jueves, 16 de julio de 2015

Y ME QUEDÉ #Recuerdos #ElTiempoTiempoTeDa

Y me quedé con el olor de tu colonia grabado en mi memoria. Esa que huele mejor en ti que en nadie. Esa que me hace recordarte en automático, darme la vuelta y aspirar el perfume de los recuerdos a través de un extraño. Me quedé con tu ritmo desafinado, con tu manera de venir bailando hacia mi como si fueras Patrik Swayze en Dirty Dancing pero en versión descordinada, con tu manía de darme vueltas y vueltas hasta que me mareaba, con tu poco oído para la música. Ese que jamás te impidió cantar a voz en grito, sin saberte la letra y sin que te importase. Me quedé con tu manía de coger los productos del súper de la parte de atrás. Con tu manera de imitarme cuando pedía en la charchutería el jamón sin sal del pozo, con los "morritos" que ponías cuando yo estaba enfadada mientras me preguntabas ¿quién soy? Y yo quería matarte pero al final siempre se me acababa escapando la risa. Me quedé con tu empeño en que me fijase en ese ceda al paso que hay para llegar a mi calle. Ese en el que según tu yo siempre pasaba sin mirar y un día me iba a traer un disgusto. Me guardé tus trucos para conducir. Esos que tanta falta me hacían cuando yo odiaba coger el coche.Con tu forma de mover el volante, esa que tanto me gustaba de ti. Con todas tus payasadas que me hacían reír a carcajadas, con todos los sitios que me enseñaste y que yo ni siquiera sabía que exisitían. Me guardé tu manera de protestar cuando te pedía que me lavases el coche, cuando me recordabas las revisiones, los cambios de aceite....y al final acababas yendo tu porque sabías que yo no tenía remedio. Me quedé con aquel concurso en México. Ese en el que el animador y yo practicamente te obligamos a participar. Cuando vi las pruebas creí que aquello me iba a costar un disgusto. Pero sacaste tu capacidad de sorprendrerme, me besaste y me dijiste ¿ a dónde vamos ahora? Me quedé con tus ojos verdes caramelizados, con ese niño que se escondía tras tus pupilas, con la ternura de tu mirada. Me quedé con tu paciencia cuando yo la perdía, con aquellas noches de fiesta en las que yo te llamaba y tu venías a mi encuentro. Te enfadabas siempre pero siempre volvías y yo nunca aprendía.  Me quedé con tu nota en una servilleta de bar, con tus post-it de buenos días, con tu capacidad infinita para quererme, para verme guapa incluso recién levantada, con esas tardes de domingo, con esas noches de cine. Me quedé con los caramelos de tu mesita, esos que usabas por sistema porque a mi no me gustaba el aliento de nadie (ni siqueira el mío) cuando se acaba de levantar. Me quedé con nuestra canción de Carlos Baute, con tu testarudez de hacer pasar por nuevo algo que llevaba tiempo hecho jirones, me quedé con ese primer "te quiero" que tanto te costó decirme, con esos abrazos que me dabas y amainaban mis tempestadas, con tus ojos destrozados cuando en los míos llovía, con tu manera de intentar ayudarme pero sin saber cómo, con tu frase favorita cuando yo quería rendirme "tú y yo tenemos para escribir un libro", con tu valentía para decir "hasta aquí", con todo aquello que antes me parecía una locura y ahora me parece muy cuerdo. Y me quedé con todo esto porque si me quedaba con el resto los resentimientos no me iban a dejar vivir. Porque tu fuiste capaz de ver la realidad cuando yo vivía encerrada en "nuestra mentira" Porque en lo nuestro los medios no fueron los adecuados pero ambos perseguíamos lo mismo: un final feliz . Y al final, ese deseo, ese fin común quedó amputado y de todo lo que soñamos solo nos quedó el final. 

sábado, 27 de junio de 2015

QUE NADIE

Que nadie te diga nunca que no puedes hacer esto o lo otro, que tu felicidad sea solo tuya y no dependa de nadie más, que la responsabilidad de TUS ACTOS no se la cargues a otros, que nadie te eclipse con sus ruidos y te impida escuchar lo que realmente quieres, que hagas lo que hagas lo hagas porque así lo has decidido, que nadie te cambie, que jamás sientas la necesidad de querer cambiar al otro, que respeten y respetes los sentimientos ajenos. Recuerda que la confianza es algo que te pasa, que no implica compromiso o lealtad por parte del otro. Que nadie te haga sentir culpable, que jamás culpes al otro de las emociones a las que te arrastran tus sentimientos, que la enfermedad del "y si" te pille fuera de casa y puedas vivir el hoy como sino hubiese un mañana. Que solo vuelvas al pasado para aprender de el, que no eclipsen el sol tus "castillos en el aire", que las películas de Disney y de amor eterno no te pongan una venda en las ojos y te hagan sufrir por no tener un cuento de hadas. Que si el final no es feliz recuerdes siempre que todo (hasta lo que duele) ocurre por algo y que si no sale bien es que aún no es el final. Que tus complejos te dejen vivir, comer, reír y amar como te de la real gana. Que abras los ojos de una vez y por fin te des cuenta de que la vida es un privilegio: no un derecho. Que las lágrimas de tus ojos sean de alegría. Y si son de tristeza que tengas el valor suficiente para llorarlo todo. Porque lo que no expresan tus ojos lo acaba llorando otro órgano de tu cuerpo. Que tengas siempre presente que el resentimiento envenena y paraliza y que el perdón te permite avanzar, te libera del otro. Que tu vida este llene de paz, que no le declares la guerra hasta tu sombra. Que no sufras por canciones, que no te pienses que las películas cuentan tu historia, que leas un libro y sientas que una parte de ti se quedó entre esas páginas. Que jamás intentes que el otro entienda porque es más fácil entender que el otro no entiende. Que recuerdes que de amor no se ha muerto nadie, que el corazón tiene una herida que acabará cicatrizando, que más tarde o más temprano volverás a reir, volverás a disfrutar del sol, del viento en tu espalda, de todo aquello que amabas y quedo sepultado por el dolor. Un día dejarás de echar de menos para echar de más y dejarás de sobrevivir para volver a vivir. Recuerda que nadie es indispensable, que estar solo a veces, es una necesidad y no un castigo, que para encontrarse muchas veces es necesario perderse. Por último: grábate esto a fuego, repítelo como una plegaria y haz una copia de seguridad en tu disco duro para que ningún formateo logre borrarlo: TODO LO QUE NECESITAS ESTA DENTRO DE TI MISMO. Sólo necesitas bajar el volumen de tus pensamientos, respirar hondo, escuchar lo que te piden tus entrañas y tener el coraje de llevarlo a cabo. 

domingo, 31 de mayo de 2015

LA VERDAD

La verdad es que voy buscando sinceridad en tus mentiras, en tus idas y venidas, en tu tortura a cuenta gotas con la autorización de esta que escribe. La verdad es que eres pura fachada, puro teatro, que no te tragas ni tú el guión que escribes, que me dueles sin sentido ni motivo. La verdad es que busco verdad, autenticidad y valores. La verdad es que no cumples ninguno de esos requisitos y por eso acudo como un imán ante tu magnetismo jodido. La verdad es que creí que cerrabas el círculo, que tantas lágrimas, tanto sufrimiento habían tenido su recompensa. La verdad es que me vendiste un cuento, que obviaste lo que pasaba después del "y fueron felices", que me metiste en tu obra sin decirme que era una actriz de reparto cualquiera en tu tragicomedia. La verdad es que no hay verdad en ti, que en poco tiempo me hiciste más daño que algunos en años. La verdad es que no te quiero, que nunca nos quisimos. La verdad es que me abrasas el alma, que intento rescatarte, que me hundo siendo tu salvavidas.La verdad es que soy incapaz de no ir en tu ayuda, de pronunciar un hasta aquí llegamos que no llega nunca.  La verdad es que no estás a mi altura, que no te mereces ni un triste suspiro. La verdad es que yo valgo más de lo que tu valdrás en tu vida, la verdad es que acudes a mi cuando buscas aprobación, cuando te sientes solo, cuando necesitas que alguien escuche tus miserias. La verdad es que las piezas de tu puzzle y el mío no encajan, la verdad es que nos forzamos a sentir algo que no sentimos. La verdad es que estoy harta y cansada, que odio jugar contigo al mentiroso. La verdad es que no confío desde que confié en ti. La verdad es que no quiero ser tu madre, ni tu amante, ni tu nada. La verdad es que te odio y amo a partes iguales. La verdad es que no hay quien te diga las verdades a la cara. La verdad es que estás tan mimetizado con tu personaje que no distingues entre realidad o ficción. La verdad es que sacas lo peor de mi. La verdad es que el orgullo no me permite aceptar, tolerar y gritar lo mucho que me sigue gustando la gente sin verdad. La verdad es que eres la mentira más grande que he visto en mi vida. La verdad es que yo entono el "mea culpa" mientras tu te disculpas. La verdad es que es más fácil mentir que ser auténtico. La verdad es que la verdad duele, que asusta, que paraliza. La verdad es que hay poca gente de verdad. La verdad es que la capa superficial que me vendiste empieza a oler a podrido. La verdad es que yo estoy quitándome capas. La verdad es que quiero llegar a la capa madre de todas tus capas. La verdad es que tienes el corazón sepultado de mentiras, que eres una pantomima de lo que puedes ser y no atreves a ser. La verdad es que conocerte es lo mejor y lo peor que me ha pasado en mi vida. La verdad es que te vendiste como una edición limitada siendo una versión límite de ti mismo. La verdad es que estoy aburrida de gente tú. La verdad es que das balance negativo a mi vida. La verdad es que me tiraste al suelo cuando por fin había conseguido estar en pie. La verdad es que contigo fui más yo de lo que lo he sido en mi vida. La verdad es que caí en tu farsa, que no me perdono por ello, que eres un error de los grandes, que me da tanta rabia todo que te arrancaría tus mentiras a tiras hasta que quedases desnudo ante tu verdad. La verdad es que yo algún día colgaré el cartel de reapertura y tu seguirás en ruinas. La verdad es que algún día dejarás de importarme y te quedarás solo con tu farsa. La vedad es que yo doy luz a mi vida y a ti te ciega tanta claridad. La verdad es que yo quiero cambiar lo que no me gusta, lo que hiere o me hiere. La verdad es que tú no quieres cambiar nada porque no aceptas nada. La verdad es que no te paso ni una más, que hay espacios de mi vida a los que jamás volverás a tener acceso. La verdad es que no podemos ser ni amigos porque tu ni siquiera conoces la grandeza de la palabra amistad. La verdad es que dimito, que le doy mi papel a otra, que las ganancias que me das no valen nada. La verdad es que sin ti soy paz y contigo guerra. 

sábado, 25 de abril de 2015

LA VIDA ES ESO QUE PASA MIENTRAS TU SOBREVIVES

Cuando miro "mirando", cuando mis sentidos están a lo que se celebra tengo la capacidad de observar el discurrir del mundo y de sus gentes: personas envenenadas por sus emociones tóxicas; en la mayoría de los casos, desbordadas por su culpas, por sus resentimientos, enfermos de tanta emoción bo expresada, de tanta lágrima almacenada en el nudo de su garganta. Veo la desidia en sus ojos, la derrota, el final amargo de los amargados, de los que llevan enfandados con la vida desde que tienen uso de razón, de esos que quieren "morir matando" , repartiendo latigazos a todo el que se cruza en su camino. Escupiendo el veneno hiriente que no puede vomitar a su familia: bien porque no la tienen o bien porque ni está ni se la espera. Y una se pone a pensar y llega a la conclusión de que morir solo es triste aunque, si soy racional se que todos perecemos solos. Los de alrededor son figurantes del final de tu existencia. Es mucho peor irte amargado, consumido por la ira y a tortazos con la vida. Y hay situaciones en las que el destino te borra la sonrisa de un plumazo y te despoja hasta de las ganas de seguir caminando. Pero a veces no se trata de eso, a veces una sonrisa no puede arreglarlo todo. Pero el asumir las cartas que te reparte la vida sí. Lo aceptes o no nada va a cambiar. Este juego hay que seguir jugándolo aunque juegues con "cartas de perdedor" Recapacita, párate a pensar por un segundo cómo es tu vida. La vida no es un problema sin solución que deas rresolver: ¡ razona más ! Y reacciona menos. Recuerda que lo que tienes no son derechos sino privilegios: la salud, el dinero, el amor... Vienen y se van como los segundos en el minutero de un reloj. Haz un "break" y mira la vida pasar ante tus ojos. Escucha las risas, los sonidos del mundo, mira las flores (su color, su olor, su hermosura inagotable) , los gestos de alguien que no sabe que le miras, lee en los ojos de los demás su tristeza o su alegría. Sal de tu mente. Date una vuelta por el exterior. Cuelga el cartel de "vuelvo enseguida" y por unos minutos deja de ser "el ombligo de tu mundo" La vida es mucho más grande que nuestro universo de obsesiones, compulsiones, culpas auto inflingidas y miedos. Si sabes mirar bien a la vida te darás cuenta de que en ocasiones puede ser hasta bonita y cuando no mírala con el enfoque adecuado. Acepta, vive el ahora porque este instante es lo único que tienes, es lo que realmente importa y te lo estás perdiendo. Porque tu mente ha decidido escindirse de  tu cuerpo, gobernarte e ir por libre. Y en ese acto de rebeldía, de "resolutor de problemas irresolubles" de "hágase mi voluntad" te estás perdiendo todo lo demás: LA REALIDAD. Haciéndote el ciego tu mundo no va a dejar de ser tu mundo. Siento decirte que por mucho que cierres los ojos y te autoengañes la verdad es tan grande que no se tapa con nada. Y jugar al "mentiroso" conlleva el riesgo de que la vida te pille desprevenido y te ponga frente a frente con la verdad. Y sufres porque de tanto negarte ya no es dolor lo que sientes: es más, ¡mucho más! Y es ahí, justo entonces cuando sufres todo el dolor que te negaste a sentir y pierdes la partida. 

lunes, 9 de marzo de 2015

SER DE LUZ

Yo, que esperaba encontrarme con la escarcha de tus ojos, con tu recelo y desaprovación absoluta me fundí en el amanecer de tu mirada, en la calidez de tu voz y en la hospitalidad de tu alma. Te limitaste a cuidarme, a mimarme y a hacerme parte de tu mundo. Desde que te vi supe que eras un ser de luz, una estrella fugaz en la constelación de mi vida, un oasis en medio de mi desierto. Y bajo esa roca firme de tu fachada habita alguien que se enamoró de la vida, que exprime cada segundo, cada libro, cada flor, cada paisaje que ven sus ojos. Eres una mezcla de sabiduría y humildad, de dulzura y fortaleza, de sonrisas y lágrimas. Jamás me cansaré de darle gracias a la vida por haberte puesto en mi camino. Me quedé con más ganas de ti, de tu tierra, de nuestras conversaciones en tu coche, como una yonki con el mono de tu voz azucarada, de tu risa celestial, de la profundidad y el amor de tus ojos mirando los míos. Hazme un favor: coge fuerzas y lucha que tenemos un encuentro pendiente en el que si tú me dices ven yo lo dejo todo.No hay un minuto del día en que no te piense, en que no daría lo que tengo por ver tu rostro, por abrazarte, por escuchar el tono de tu voz, por salvarte con una varita mágica de un destino que esta muy alejado de lo que te merecías. Y maldigo cientos de veces a los kilómetros que nos alejan, a esta península que separa nuestros nortes, que impide nuestro "bis a bis" A pesar de todo mi corazón esta sincronizado con el sístole y el diástole del tuyo.Si te flaquean las fuerzas yo seré tu muleta, si solo ves oscuridad me transformaré en un amanecer, si lloras te secaré las lágrimas a besos, si estás triste seré el bufón de tu corte hasta que te rías, si desesperas seré tu esperanza, si saltas me iré de cabeza contigo y si decides quedarte en el suelo seré el mármol que te sostenga. Y es que, como bien sabes mamina, hay cosas que la distancia hace más fuertes y que no mata. Lejos pero siempre muy cerca de ti: de cada pensamiento, de cada parpadeo de tus pestañas, de cada segundo de tu maravillosa existencia. TE ADORO

sábado, 28 de febrero de 2015

NO AL MALTRATO ANIMAL

Últimamente he leído demasiados artículos sobre las barbaridades que el "ser humano" inflinge sobre los animales. Y cuando escuho, veo o leo una noticia de este tipo a mi me mente siempre viene la misma pregunta: ¿Quién es el animal ahí? ¿Cuànto odio guarda una persona hacia si misma y hacia lo que le rodea para hacer algo así? 
     Recuerdo de pequeña ver como en Francia un indigente bajaba a patadas a su Doberman mientras este se deshacía entre aullidos. Aún siento la misma impotencia que aquel día, aún no llego a comprender cómo ese perro, minutos después estaba acostado junto a su amo como si nada hubiese pasado. Y es que, los animales son proyecciones mejoradas del ser humano. Un animal no entiende de rencor, odio y resentimiento. Creo que han venido a la tierra para curar los corazones solitarios, para llenar de luz la oscuridad de muchos, para hacernos reír y llorar, para darnos una lección de vida y mejorar las infancias de muchos niños. " El que tiene un perro no sabe lo que tiene" que lo cuide y lo disfrute y, que aprenda mucho y bonito de su mascota. 
      Al igual que se requiere un test para tener licencia de armas yo propongo que se haga uno también para tener un perro. Un perro no es para orzganizar peleas, o para venir de caza con nosotros hasta que nos sirva, no es un saco de boxeo ni es una prenda vieja de la que te puedes desprender cuando te canses. Quién maltrata o abandona a un animal es que no tiene alma y, de desalmados està el país lleno.Que exista justicia para los animales, que su indefesión sea corregida por medio de leyes, que el que hiera o mate a un animal pague por ello, que esta "gente" que no sabe vivir en sociedad pase una temporada a la sombra y pague por sus pecados. 

miércoles, 25 de febrero de 2015

Puntos de partida que lo parten todo

Te veo ahí en ese maldito punto de partida que lo parte lo todo y quisiera sacarte a rastras de esa línea de salida. Desearía que no cometieses mis errores, que el golpe no te dejara tocado y hundido, que tu corazón solo sintiese una punzada de dolor, que tu pena durase una milésima de segundo pero, precisamente es por estar donde tú has estado por lo que no tengo derecho a pedirte nada. Solo puedo decirte que el golpe te tumba pero no te mata. Y cuando estás en el suelo, cerrado por derribo, desquiciado de tanto pensar, de tanto llorar sin lágrimas, de tanto preguntarte por qué, de tanto abrasarte por la rabia solo quieres mimetizarte con el frío mármol de la baldosa, solo desearías no sentir ni padecer, ser fuerte por ti y por todos los que te rodean. Pero cuando el dolor te ataca sin paliativos, cuando te tocan lo "más sagrao", la capa de "superman" se cae y solo queda el humano. Y no hay fórmulas mágicas, ni hechizos, ni varitas de la felicidad: solo instantes, tiovivos de emociones, de sentimientos encontrados, de vivir o de no querer hacerlo. Sea lo que sea y sientas lo que sientas te digo que todo llega y todo pasa, que irás quemando etapas y que si tú saltas yo me haré kamikaze, si tú te rindes yo ondearé la bandera blanca,  si lloras seré el cleenex, si tienes una herida seré la cura, si necesitas calma seré el silencio y estaré ahí a una distancia prudencial. Aunque mal de muchos sea consuelo de tontos fíjate en este botón descosido que fue capaz de coserse más fuerte a su chaqueta: si yo pude, tú también. 

viernes, 20 de febrero de 2015

¿QUÉ TE VOY A DECIR?

¿Qué te voy a decir? ¿Qué maldita tecla toco para que tengas más sentido común y amor propio? Creo que ninguna, que aunque me duela es más fácil entender que tú no entiendes, que vas en caída libre y sin paracaídas. Pero me siento como si te estuviese viendo desde el suelo y me moviese desesperada de un lado a otro para que no te partieses la cara contra el suelo. A veces es necesario romperse todos y cado uno de los huesos del cuerpo para recomponerse. Y da igual que te advierta, que lo grite, que te implore que no saltes porque se que yo en tu lugar saltaría. Solo espero poder estar ahí cuando las piezas del puzzle dejen de encajar, ser la anestesia que mitigue el dolor de tu caída al vacío, la que te diga que el único delito que has cometido es ser coherente contigo y con lo que querías,que te sobró el valor para intentarlo y se te partió el corazón en el impacto. No serás la primera ni la última con heridas de guerra, esto ni te matará, ni te dejará insomne ni triste para siempre. Cuando pases el periodo de convalecencia, empezarás a rehabilitarte, a dar pequeños pasos, a querer levantarte porque lo sientas, a sonreír, a decir Sí a la vida de nuevo. Mientras tanto solo te pido un favor, que recuerdes esta frase: TODO PASA Y TODO LLEGA. 

domingo, 15 de febrero de 2015

COSAS QUE LA DISTANCIA NO MATA

Como decía la gran Celia Cruz: "La vida es un carnaval" pero, sucede que a veces se baja el telón,se apagan los focos, te cierran los bares y se acabó la fiesta que se daba. Ojalá tuviese una varita mágica con la que convertir tus días en festivales, ojalá pudiese estar ahí cuidándote, otorgándote el título de mi enferma favorita, ojalá pudiese sacarte de ese hospital, quitarte la enfermedad de un plumazo y llevarte a tu casa. Porque irradias tanta luz, tanta paz y tanto amor que me parece injusto que este embotellado entre cuatro paredes. Pero para que sigas brillando a veces es necesario que pongas en Standby la luz. Que te cuiden mucho, que al entrar por tu puerta aquellos que te curan y cuidan pongan en modo automático su mejor sonrisa, que descanses, que te recuperes, que pienses en ti y tu salud que es lo que importa ahora, que vuelvas  pronto al campo de batalla mi dulce guerrera. Cuánto me pesa la distancia , cuanto siento no darte un abrazo y un beso infinito, cuánto me gustaría arreglar el mundo contigo tomando un café, ver tu dulzura proyectada en tus pupilas, sentir la melodía de tu voz fundiéndose en mis tímpanos. Ojalá pudiese devolverte ese abrazo, esas palabras que me dijiste cuando lo veía todo oscuro pero ¿sabes qué? Que estamos a un vuelo de distancia y que el cariño no entiende, ni se evapora por los kilómetros que te separan de las personas que amas. Anota mi deuda pendiente contigo, prometo volver a verte de nuevo y devolverte con intereses todo el cariño que te debo. Te quiero y te requiero. Aunque lo sepas, aunque no te haga falta leerlo para saberlo yo necesito escribirlo alto y claro. 

viernes, 6 de febrero de 2015

Y QUISIERA

Y quisiera meterme en tu cabeza, darte mis ojos para que tú te vieses como yo te veo, para que mandes a paseo tanta obsesión, tanta queja, tanta victimización absurda. Porque eres mucho más que todo eso, porque tienes dentro de ti mucho potencial que inviertes de manera equivocada. Y tu mejor que nadie sabes que las excusas son un paso más hacia al abismo, que si hacemos lo de siempre obtenemos lo de siempre, que la mente es tan poderosa como nosotras la dejemos serlo. Valió ya de vivir de rentas, de traumas del pasado, de esperanzas de un futuro imaginario. Estamos aquí, en este instante, que es lo único que tenemos. Vive el hoy para que tu mañana pueda ser mejor, quéjate cinco minutos, saca toda esa mierda de dentro y olvídalo. Porque lo único que puedes cambiar es a ti misma. Las circunstancias, las personas que interaccionan contigo en este día a día llamado vida no las puedes moldear a tu antojo y semejanza. Vive y deja vivir, respeta la opinión del otro, no pienses por los demás, no te creas en posesión de una verdad absoluta, no pienses que tus errores pueden ser los míos y me juzgues por ello. Yo soy yo y tú eres tú y aunque siento lo tuyo como mío y viceversa sé que cada una debe soportar sus cargas, debe levantarse sola. Y porque te quiero a veces debo ponerte límites, a veces tengo que frenarte y no alentar tu locura y más aún si eso me lleva enloquecer a mi. No puedo luchar por tus causas y las mías, no puedo salvarme y salvarte, no puedo razonar y hacerte razonar, no puedo ayudarme y ayudarte, no puedo hacer que estés en paz cuando vives cada minuto, cada situación como un conflicto bélico. Si quieres liarte a tiros y disparar balas envenenadas apunta hasta que no te quede nadie a quien contaminar pero yo no me voy a meter en tus guerras, ni darte la razón solo porque te quiera. Precisamente es por eso y solo por eso por lo que tengo que frenarte con las verdades que no quieres oír, es por eso que te digo que asumas tu parte de responsabilidad, que te comportes como la adulta que eres, que aunque te entienda porque nos parecemos demasiado no puedo estar más en desacuerdo contigo. Deja de pelear con el mundo, con el presente, con el pasado y hasta con las piedras que se cruzan en tu camino: vive y deja vivir. Y no soy ejemplo de nada, más bien si fuese el espejo de algo sería de lo que no hay que hacer en esta vida porque he cometido muchos errores pero es hoy, cuando la vida me da una nueva oportunidad para cambiar cuando le digo que SI, que aunque me cueste ya no quiero ser lo que era, que ya me cansé de vivir siendo lo que los demás querían, de culpar a todo y a todos de MI VIDA, esa que libre y voluntariamente yo escogí, Porque cada paso, cada vez que giré, que caí, que me levanté no fue por nada o por nadie: fue por mi. Libérate de tanta locura, de tanto resentimiento absurdo, quita la opción de centrifugado en tu cabeza y vive bien y bonito porque sabes hacerlo y porque te lo mereces.

lunes, 26 de enero de 2015

¿LA SALUD ES UN DERECHO?

De la teoría a la práctica todos sabemos que hay un mundo. Pero hay cosas con las que no se debe sacar la tijera ni por error. La salud es un derecho y la vida de una persona vale más que cualquier objetivo, que un puñado de euros. Si me preguntan a mi que ahorren en altos cargos inútiles, en el cambio de despacho del gerente de turno pero no en la calidad de los cuidados. Abrir una planta tarde mal y nunca, con mobiliario de cuando mi abuela dio a luz, no poder pedir material porque lo único que quiere la dirección es cerrar la planta lo antes posible, porque piensan en números; son cosas que a estas alturas no se deberían consentir. Como si las personas, si los que están en esa cama no fuesen humanos, gente enferma que merece unos cuidados de excelencia. Por no tener no sé tiene ni lo básico. Por faltar falta hasta mano de obra. Y al final, como lo que te importa es el que esta en la cama prefieres pasarte la mañana meándote o sin beber agua que dejar a algún paciente en pésimas condiciones. Y tiras como puedes pero lo haces por ellos, que al final son los grandes damnificados. Y para colmo encima están hasta agradecidos y se toman la situación tercermundista hasta con risas.
   Hoy hablaba con una compañera y me decía: ¿ Sabes lo qué me da más pena? que no puedo disfrutar de mi profesión, que no tengo ni cinco minutos para mirarles a la cara. Cuando éramos alumnas eso no pasaba. Y pensé que suscribía sus palabras sin cambiar ni una coma. Y si, se que muchos nos ven sentadas haciendo las altas en el ordenador, anotando cuidados o escribiendo el cambio y piensan que estamos ahí sin hacer nada, que sobra personal pero por sobrar no sobran ni las pajitas para beber, ni los equipos para poner medicación, ni las mascarillas ( esas que yo me dediqué hoy a cambiar una por uno porque me daba vergüenza ajena como estaban. Y si se acaban se repone que es lo que hay que hacer ) No hay derecho a no tener un equipo de curas o una pastilla de más, o dos manguitos para tomar las tensiones con la excusa de que quieren cerrar lo antes posible. Y si me escucha le diría al gerente que se encomiende a la Virgen porque en mi planta alta que se da cama que se ocupa. Y sería tan sencillo como tener lo justo y necesario para reponer si algo hace falta ( que por no haber ni jeringas de 20cc teníamos un día) y si sobra algo no se pierde señores jefazos. Se distribuye por otros plantas cabezas huecas. Pero bueno, es lo que tiene manejarse en euros. Que te da igual no tener colchones antiescaras, que las paredes se caigan a cachos, que los palos de gotero no encajen, que el personal esté trabajando a carreras. Lo importante es esconder la mierda bajo la alfombra y tenerles ingresados como, dónde y en las condiciones que sea. Y si ahora aparece por allí la madre de un alto cargo y la meten en ese planta pues mira ni tan mal. Pero ella no va a ir a ese sitio, a ella le espera una cama, una habitación individual con las mejores vistas y comodidades, un trato exquisito, ella no tendrá que esperar horas tirada por los pasillos de las urgencias, a ella no le dolerá todo el cuerpo de pasar demasiados minutos en camillas de mierda, en camas arcaicas, en plantas que están más para reformar que para abrirlas en esas condiciones. ¿Dónde esta la humanidad del ser humano? ¿Por qué se les olvida que trabajamos con personas? ¿por qué importan más los objetivos que los enfermos? ¿Desde cuándo la salud es un privilegio y no un derecho inamovible?

viernes, 23 de enero de 2015

PRIMERA VEZ #ComedoresCompulsivos #Experiencia

Recuerdo la primera vez que crucé esa puerta, por acordarme me acuerdo de hasta como iba vestida. Entré con la cabeza agachada, como si hubiese cometido el mayor de los pecados capitales, como si mi deshonra no se redimiera con nada. Era la última puerta que quedaba por abrir. No había psiquiatra, ni psicólogo, ni pastilla antidepresiva que me quitase las ganas de comer y me devolviese las de vivir. Iba arrastrando mis culpas, mi vergüenza, mis complejos. Tenía los objetivos muy claros: 3meses en terapia, puesta a punto para la operación bikini y aquí paz y después gloria. Me recibieron como se recibe a cualquier recién llegado y al exterminar de su vocabulario las palabras dieta y terapeutas creo que me quedé de pie por la pereza de no tener que levantarme del suelo para irme a mi casa.   Y pensé que la desesperación me había llevado al sitio equivocado, ni siquiera tuve el valor de decir lo que era, de asumir mi realidad. Solo dije soy Aida (lo de comedora compulsiva me lo comí como solía tragarme las emociones) y cuando empecé a escuchar lo que decían aquellos "expertos sin titulación" sentí que una conexión fuerte y extraña me unía a ellos. Me acuerdo de cruzar miradas con algunos, de sentir el amor en los ojos de otros, de entender que su historia era la mía pero con variantes.  Y cuando todo acabó me abrazaron, me besaron y yo pensé que era mucha confianza para el primer día, que aquellas muestras de apoyo y entusiasmo no podían ser reales. Yo, que contra más quiero menos lo demuestro, yo que no besaba ni a mis amigas, yo que solo decía "te quiero" al malnacido de turno del que me hacía adicta. Salí corriendo de allí en cuanto pude y juré no volver. Esa noche volví a atracarme. Algo me removía las entrañas, me hacía pensar, me quemaba. Y las dudas, siempre las malditas dudas en mi cabeza. Hice encuesta popular para que los demás me dijesen si me convenía seguir yendo o no. Solo una persona me dijo: no tienes nada que perder. Y aún a día de hoy no sé como seguí cruzando ese umbral pero allí sigo. 
    Y cuando veo a alguien nuevo los prejuicios me acechan pero luego tienen agallas y dicen alto y claro su nombre, su problema y lo que opinan. Y a mi me dejan sin palabras. Ojalá alguien hubiese grabado mi cara el día que fui allí. Yo las que he visto de primeras son la viva imagen de la derrota, de la esperanza sin esperanza, de quemar el último cartucho. Y sé que yo también llegué en condiciones deplorables, empachada de vivir por obligación, despojada de ilusión alguna. Y lo que se a día de hoy es que esa gente me resucitó, me enseñaron que la vida se puede vivir bien y bonito, que no hay nada para siempre, que el esfuerzo, las ganas y el hacer por uno mismo valen más que cualquier tesoro, que la vida es un carrusel con altibajos, que los defectos pueden ser perfectos, que expresar emociones no es malo, que hay momentos para el llanto y la risa, para caer y levantarse, para negar y rectificar, para abandonar y volver, para derotarrarse o estamparse contra el muro de las obsesiones. Pero la mayor lección que me enseñaron fue a superarme, a perdonarme, a amarme, a responsabilizarme de mi vida, a poner límites, a no salvar vidas ajenas cuando la mía hacía aguas, a creer, a emocionarme, a esperanzarme. Incluso me enseñaron a volver del "lado oscuro" sin necesidad de sermones, imposiciones o mítines. Su silencio cuando quieren hablar, su respeto cuando yo me lo pierdo a mi misma,su preocupación dándome mi espacio, mi tiempo de ensayo-error y vuelve a empezar es el imán que me hace volver a su encuentro, es la metadona que alivia  tanto comilona emocional, tanto daño auto inflingido. Gracias a todos ellos se que si se quiere se puede, que la esperanza es inagotable y que una vida mejor es posible si yo decido darme una tregua y firmar el tratado de paz conmigo misma. 

martes, 20 de enero de 2015

Blue Monday #DíaMásTristeDelAño

Ayer fue el "Blue Monday" el día más triste del año según los expertos. En otro momento habría usado este pretexto para deprimirme, para poner canciones tristes y mimetizarme con el día, para pensar en todo lo que anhelo para ser feliz pero que sé que no me dará más que nuevos vacíos, para contar al mundo mi desdicha, mis miserias entre líneas. Supongo que como hace poco pasé por una etapa de anestesia emocional y estoy empezando a despertar a la vida me niego a dejar que mi mente contamine lo que pienso y siento. Que viviese tan mal durante tantos años sin saberlo no me da excusa ni derecho para no cambiar mi actitud, para no dejar de pelear con la vida y los que forman de ella.Las circunstancias, el resto o los designios del destino no los puedo cambiar pero a mi si. Acepta el bombón que te da la vida y si no te gusta recuerda siempre que por quejarte, maldecir, culpar o enfadarte el problema va a seguir ahí con una mala hostia al cuadrado que nublará tu raciocinio, que ocupará un maravilloso tiempo a tu cerebro. Un tiempo en el que podrías buscar la salida a eso que hoy es un callejón sin salida. Pero no, el ser humano se culpa, se lamenta, se avergüenza, se mete en el "y si hubiera hecho esto" "y si lo otro" "voy a preguntar a unos y a otros para ver que HAGO CON MI VIDA Y MIS ASUNTOS" y al final solo consigues marearte tú y marear a los demás. Respira hondo porque no hay nada por grave que parezca que no tenga remedio, agudiza tus sentidos ya que la respuesta que necesitas muchas veces aparece en forma de amigo, pareja, película, libro o derivado. Si escuchas más y hablas menos la vida te responde, lo que ocurre, es que muchas veces negamos nuestra realidad o queremos escuchar con los oidos taponados y eso, amig@s mías se mire como se mire es una trampa. 

domingo, 18 de enero de 2015

PREGUNTAS QUE SI NO TE HACES IMPIDEN CAMBIOS #Miedo #autoestima #valor #examendeconciencia

¿Por qué le cuesta tanto al ser humano aceptarse? ¿Por qué vivimos tan mal y pensamos que lo hacemos tan bien? ¿ por qué nos engañamos, por qué nos saboteamos? ¿ por qué nos negamos a crecer como personas? ¿por qué llevamos años y años tropezando en la misma piedra y le hemos cogido cariño? Para que se produzca un cambio, un terremoto interno lo primero que debemos hacer es asumir que algo no va bien, luego no intentar engañarnos y  finalmente no justificar nuestra actitud con excusas baratas. ¿ Y cómo se traspasan esas barreras? ¿ Cómo te quitas el miedo del cuerpo? ¿ Cómo deja uno de vivir el pasado y el futuro mientras se inmoviliza en su presente? ¿ Cómo se responsabiliza uno de su vida y deja las ajenas? ¿ cómo empezamos a asumir nuestra responsabilidad en las decisiones que tomamos? ¿ Cuándo se nos meterá en esta cabeza tan dura que soy yo con lo que pienso y siento el que me hago las cosas, qué nadie me hace nada? ¿Cuándo dejaremos de culpar al universo y a las personas que nos rodean de NUESTRA vida? ¿ No es más sencillo cambiar tú, que cambiar a los doscientos que tienes a tu alrededor? ¿Acaso conocéis a alguien que intentase cambiar a otros y lo lograse? Si alguien pudo que me de razón aquí por favor. Lo bueno de echar balones fuera es que te sientes falsamente bien, eres víctima de los actos de otros, la gente te pasa la mano y encima te sientes respaldado. El problema viene después: con las noches de insomnio, con las cosas que te dices cuando haces algo "mal" ( yo siempre me digo "eres idiota"), con las enfermedades ( defensas bajas, acné, dermatitis nerviosas y así un largo etcétera) ¿Cuánto tiempo podemos estar hablando de los defectos de otra persona?  ¿Cuánto tiempo podemos hablar de los nuestros? ¿Cuándo hay que hablar de dos quién es el que empieza por uno mismo? y en caso de empezar, de ir de honestos y de conciliadores decimos en el tono más sarcástico que podemos que actuamos de tal o cual manera por lo que nos hace sufrir la actitud de nuestro interlocutor. Pagamos un precio muy alto por mentiras que ni siquiera nosotros nos tragamos. Pero es más fácil salvar vidas ajenas que mirar en nuestro interior, que comprender lo que anda mal. Porque ha nadie le gusta ver cosas que escuecen, ver que nos equivocamos, a nadie le gusta ser el capitán de su vida para LO MALO. ¿Por qué vivimos empeñados en qué este, el otro, la otra viven para hacernos daño? ¿ si no se qué coño hacer conmigo cómo diablos voy a saber que hacer contigo? ¿ Por qué siempre nos creemos nuestra VERDAD como LA VERDAD ABSOLUTA? ¿ Por qué jugamos con la doble moral de "a mi que me entiendan que mi vida ha sido una mierda" pero luego no nos molestamos en saber cómo fue la vida del otro y por qué actúa como actúa? ¿Por qué queremos hacerlo todo bien y lo hacemos tan mal? ¿ Por qué juramos que yo eso no lo haré jamás y lo hacemos? Da igual que la señal de peligro este con un neón gigantesco en el camino porque ya nos buscaremos nosotros la manera de hacernos los ciegos y de lamentarnos cuando nos acechen las consecuencias. ¿Por qué nos mata la culpa? ¿ por qué el resentimiento nos dura años y la humildad tan poco? ¿ Por qué expresar las emociones es malo? ¿ por qué llorar es de débiles? ¿Por qué asociamos una fecha con algo doloroso que nos tortura año tras año por cosas que ya pasaron? ¿Por qué nos enterramos en vida? ¿por qué tenemos el derecho a gritar, a poner mala cara, a criticar, juzgar, prejuzgar al resto pero...pobre del que lo haga conmigo? Somos tan cínicos, tan demagogos. Al final damos más vueltas que un perro para echarse para no llegar a la conclusión final, a la que hace herida y escuece: algo no va bien en mi, debo cambiar. Hay que admitirlo pero sin justificarse. Porque si me escudo en mi pasado mato cualquier posibilidad de cambio en mi presente. ¿por qué no reconocemos que la mente y los sentimientos gobiernan nuestras vidas, que somos sus peones? ¿Por qué creemos que cambiar es como un examen de la facultad? que lo hacemos y nos podemos olvidar ¿Por qué no asumimos que el ser humano sufre cambios continuos a los que debe enfrentarse y adaptarse? ¿por qué tenemos tanto miedo a la catarsis, a vomitar todas esas cosas que nos han hecho daño durante tantos años? ¿ Por qué no saco lo que estorba para qué los "cadáveres" de mi pasado no me hieran? Porque conocerse es considerado un deporte de riesgo y porque el MIEDO es más grande que las ganas de cambio, que la voluntad o la fuerza, o el arrojo o la perseverancia. Y al final todo parte de la madre de todas las bases: el autoestima. Esa maldita manía que todo hijo de madre tiene de considerarse imperfecto, inferior, desafinado, estropeado. Algunos lo expresan con la infravaloración y otros con sobrevaloración pero, tanto unos como otros ni se quieren, ni se aceptan. Y no digo yo que no haya seres excepcionales en paz consigo mismo y que apuesten por su vida, se perdonen y se cuiden pero, también creo que los podemos contar con los dedos de una mano. ¿Si tú no te quieres a ti mismo cómo diablos vas a amar a los demás? ¿ Si no tienes fe en ti mismo cómo vas a tener fe en algo o en alguien? ¿ Si desconfías de ti te crees capaz de confiar en alguien más? Pero nos resistimos a la verdad porque hacer cambios internos lleva mucho tiempo, dolor y agallas. Y estamos acostumbrados al éxito, nos educaron para hacernos pensar que si a la primera fallabas era una tragedia, que todo se debía conseguir en tiempo récord, que teníamos que hacer mil cosas a la vez y todas de manera perfecta, que había que estudiar mucho para tener una carrera, dinero y casita en la playa, nos atiborraron a películas de Disney para que comprendiéramos lo que era una pareja estupenda y la encontráramos (aunque luego en nuestra casa solo hubiese llantos, gritos, emociones ocultas y apestase a codependencia y toxicidad en cada metro cuadrado de ese nuestro "hogar") ¡Ah! y los  hijos y el perro que no falten nunca por favor, que el arroz no se te pase. ¿Por qué el mundo se ha creado en base a la competitividad? ¿Por qué la educación era como una carrera de fondo en la qué solo importaba correr a toda hostia, sin mirar el camino, sin disfrutarlo?Llega el primero, forma parte de esta sociedad ansiolítica y asfixiante con una sonrisa y sin rechistar. ¿ Por qué reaccionamos y no razonamos? ¿Por qué tenemos tanta prisas en resolver nuestras ecuaciones complejas? ¿Por qué buscamos en lo ajeno lo que esta escondido en nosotros? ¿Por qué no abrazamos, besamos, decimos te quiero a los que amamos? ¿ Por qué tratamos tan bien a los extraños y tan mal a la familia? ¿Por qué perdonamos las faltas del resto, incluso las que no tienen ni pies  ni cabeza y a la mínima que detectamos un fallo por nuestra parte sacamos al tribunal a repartir estopa, a condenarnos en el fuego eterno de "por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa"? ¿Por qué tenemos tanto miedo de conocernos? ¿Por qué actuamos para gustar a los demás? ¿Por qué su aprobación es más enriquecedora que aceptarme a mi mismo cómo siento y pienso? ¿Por qué nos levantamos de mal humor? ¿ Por qué no damos el golpe de gracia y empezamos a ocuparnos de nuestra vida y a dejar en paz la de los demás?

martes, 13 de enero de 2015

REILUSIONARSE #Libros #LuisGalindo

Llegó a mi vida como suelen llegar las mejores cosas: por casualidad. Y al principio no me gustó demasiado pero no suelo dejar un libro a medias por respeto al autor que escribe esas líneas. Pensé que era todo palabrería barata, positividad hasta el empalague pero estaba equivocada. La teoría no cambia, las bases son las mismas que he escuchado cientos de veces. Todo depende de como mires el vaso. Este libro te habla de lo realmente importante, de los prismas desde los que puedes contemplar una situación, de las pequeñas cosas que te llenan el corazón hasta desbordarlo, de gestos, de luchas diarias, de granitos de arena que acaban siendo montañas. ¿Y cómo vamos a reilusionarnos estando enfermos, en paro, con el corazón roto? ¿De dónde vamos a sacar las ganas para ver el color en este mundo lleno de injusticias, corrupción y miseria? Poniéndole ganas. Algo tan sencillo como difícil de poner en práctica. Muchas veces me paro en seco y pienso  ¿estando triste arreglas algo? ¿O maldiciendo? ¿O dándole la espalda a la vida? Este libro me recuerda lo que decía Jorge Bucay: que la felicidad es algo que ocurre de la piel para dentro y que el ser humano tiene un concepto erróneo de ella y, espera tanto de la felicidad que la ha hecho inalcanzable. La felicidad no es estar siempre contento, no se mide por cosas materiales, por éxitos, porque todo nos parezca maravilloso. La felicidad  aparece, se siente un día sin más. Pero para que deje de jugar al escondinte  es necesario que dejemos de hacerlo con nosotros mismos. Aprende a vivir contigo, acepta lo bueno y lo malo, sigue tus principios y observa que pasa, que se siente. Recuerda que todo lo que tenemos en esta vida: un cuerpo que cumple sus funciones, una familia, nuestros cinco sentidos no son derechos  sino privilegios por los que debemos dar gracias a la vida. Pero estamos tan ocupados con todo lo que queremos, con acumular bienes, éxitos y reconocimientos que descuidamos el alma, esa que requiere de nuestra atención pero que siempre esta la última en la lista, esa que hacemos enfermar, esa que nos ha llevado a ser lo que somos: una sociedad ansiolítica. 
   Lo que pretende el autor es decirmos que siempre estamos a tiempo de decirle Si a la vida, que pequeños gestos pueden hacer muy grande nuestra existencia, que reilusionarse, como todo, es una cuestión de actitud. 

sábado, 3 de enero de 2015

IDIOTA

Idiota yo por creerme la mentira, por esperar al "algún día", por pensar que me querías, por consentirte, por idiolatrarte.Idiota yo por tragarme tu película, tu teatrillo de poca monta, por estar dispuesta a dejarlo todo, por no ser feliz y no tener el valor, ni el amor propio de plantarme. Idiota yo por esforzarme, por ser tu juguete cuando no tenías nada que hacer, por tus ausencias. Esas que sospechamente coincidían con tus salidas nocturnas. Idiota por creer que estabas celoso, que me querías en tu vida. Idiota por no ver tu juego sucio, tu cobardía, tu doble cara. Idiota yo por aguantar tus manías, tus desplantes, tú maldito amor envenenado. Idiotas mis lágrimas, mi corazón oxidado de tanto llorarte. Idiota mi voz por cantarte Sabina, por recitarte frases de libros, idiotas mis dedos por escribirte, idiota mi maldita manía de regalarte el mundo, idiota por despertarme a prepararte el desayuno, idiota por todas las sorpresas, por todos los collage, por las noches frías en el campo de fútbol, por ser la imbécil a la que paseaste como a un mono de feria, idiota por contarte cosas que muchos no saben, idiota por excusarte, por defenderte, por estropear una barra de labios escribiendo mentiras, idiotas mis labios por besarte hasta desgastarme, idiota mi cuerpo por amarte, por abrazarte, idiota por hacer el idiota, por ser más cariñosa de lo que he sido en mi vida, idiota por confiar en ti, por no querer un Febrero y no tener la valentía de decirte: tenemos que hablar. Idiota por soñarte, por recordarte, por padecerte. Idiota yo por toda la mierda que he aguantado, por ser "tu chica para todo", por ser una completa ausente en tu muro de facebook, en tu Whatsapp, en tu mundo de perfección y éxito. Idiota por no dejar de ser la misma idiota de siempre, idiota por soñar tus sueños, por eclipsarme con tu mirada y tus mentiras caramelizadas, idiota por creerme tu reina y no ser más que tu absurda cenicienta: ¡idiota!